Aunque la crisis del COVID 19 cerrase los centros de Formación Profesional, sus profesores y sus máquinas no han parado.
TKnika, centro de investigación aplicada a la Formación Profesional, recibió el reto de poner el conocimiento y la tecnología de la Formación Profesional en manos del Departamento de Salud. A raíz de ello, Miguel Altuna en colaboración con otros 59 centros de Formación Profesional y bajo la coordinación de TKnika, han puesto en marcha diferentes proyectos.
Ante la falta de material para proteger a los profesionales sanitarios, TKnika y los centros de Formación Profesional, aceptando el reto del mundo Maker, comenzaron a producir pantallas de plástico con impresoras 3D para formar a los alumnos. De ellas, 5000 fueron distribuidas en hospitales y otras 200 fueron distribuidas a centros sanitarios, residencias de ancianos y comerciantes cercanos a sus instalaciones.
Actualmente se ha desarrollado un molde con otro sistema que permite crear 200 pantallas por hora.
En colaboración con el Departamento de Salud se han desarrollado otros proyectos como palitos de detección de Coronavirus o el encargo de crear mascarillas que ha supuesto todo un reto para los investigadores de biociencia y sostenibilidad de TKnika.
La colaboración de los centros de Formación Profesional ha tenido eco, como muestra de ello, la noticia La Formación Profesional frente al COVID 19, emitida en el programa ‘Teknopolis‘ de EITB- Euskal Irrati Telebista.
